Recuerdos de un Amor
Esta es una historia que marco la vida de Sofía. Ya hace más de diez años un amor perdido, al que ella jamás había podido imaginar la dejaría en un total de las depresiones.
Tal así que desde su juventud ella amo y supo amar.
Fue Juan quien entelo a Sofía en su corazón. Juan la había conocido en una fiesta de colegio. Sofía era una chica de apariencia discreta pero frágil de corazón.
Tan solo unos meses de amistad y luego de tres años de noviazgo, con tan solo veintiun años, Sofía quedaba embarazada. El sus fue total para Juan quien no aceptaba, hasta llego a tratar a Sofía como una cualquiera.
Los padres no aceptaban lo que le había pasado a Sofía y tomaron medidas de eso..
-Mira. Como nos paga -Dijo el padre a Juliana, madre de Sofía.
Aun así ella no perdía la esperanza, que otro amor llegara a ella. Alejandro un viejo amigo se había enterado de lo que le había pasado a su viejo amor. -Quien es - dijo el padre - No lo se, Señor - dijo la enfermera - Una silueta robusta, de cabellera negra y ojos marrones y de rostro firme pero con una pequeña palidez en su rostro. Alejandro - respondió Sofía, con lágrimas en los ojos.
-Hola Don Bataglia - dijo el joven -Minutos después la enfermera dio de alta a Sofía y tan solo le dijo: Si sientes mareos es normal..
Alejandro paso a ser de amigo a novio de Sofía, aun así que Sofía estuviese esperando una criatura, y con mucha alegría le había dicho que cuando naciera la criatura lo reconocería como suyo.
Aún así los padres de Sofía no aceptaban a Alejandro en la familia y era por la desconfianza que había dejado Juan como novio. Nada mas de el se supo luego que se entero que Sofía estaba embarazada.
Alejandro fue incondicional para Sofía, habían ya pasado nueve meses y la criatura había nacido, aun el estaba con ella.
Pasaron cinco años del nacimiento de la criatura , Alejandro, decide tomar una decisión muy grande en su vida - Sofía hay algo que quiero decirte -Si, dime- Dijo la niña- Te casarías conmigo?. Los ojos azules de Sofía estallaron de lágrimas y tan solo faltaba la decisión de los padres de Sofía.
Estaban en la mesa, Don Bataglia con su esposa y Sofía junto a Alejandro, y luego de varios minutos Alejandro decide tomar la iniciativa de decírmelo a los padres.
-Papa, hay algo que nosotros debemos decir, aquí en frente a ustedes - dijo Sofía entre risas -Y que es hija - dijo el padre-
- Bueno Don Bataglia Sofía y yo queremos casarnos. Tan solo esa palabra producía ira a Don Bataglia. Con mirada serena y certera, ¡no!
Así termino un romance que duro para Alejandro que aun así amaba a Sofía. Cada vez que se encontraban, Alejandro le decía que aun la amaba, y esas palabras hacían que Sofía se sienta segura con el , porque sabia que estaba hay siempre , siempre....
Cada uno hizo su vida, pero tan solo la soledad y la amargura cogia el corazón de los dos.
Un domingo recibe el llamado de una amiga suya, a quien nunca llego a saber quien era tan solo dijo; Ven rápido el esta mal, sufrió un accidente.
-Quien -Respondió Sofía - Y la respuesta fue directa y dolorosa.
- Alejandro.
Tan solo cogio su cartera y tomo rumbo hacia su casa, tan solo oraba y pedía a dios que no este grave y se salve de ese accidente y no le deje sola..
Llego hasta la casa habían una ambulancia y caterva, entre ellos vecinos y amigos. No dejaron entrar a Sofía, pero luego de varios intentos una mano tomo la suya y era Marta la prima de Alejandro quien estaba con lágrimas en los ojos. Entro en la pieza de Alejandro y no lo encontró, luego vio que estaban en la sala los médicos y Alejandro tirado en el sofá. Alrededor estaban los doctores tratando de ayudarlo. Se arrodillo Sofía y frente a ella un medico dio su lugar para el ultimo encuentro.
Tomo su mano y le dijo al oído: "No me dejes, mi amor, te necesito, no me dejes, por favor" Sofía le acomodaba el pelo mientras le hablaba y tan solo dijo; No hables, calla que luego estaré contigo Sofi, Una sonrisa espontánea quedo grabada en el rostro de Alejandro. Con la cabeza baja y entre sus manos, Sofía se encontraba y fue Marta quien le dijo al oído- Suéltalo el ya no te escucha, se fue. Sofía no permitía y cayo en un profundo desmayo. El hombre que había amado y querido, se había ido de ella para siempre.
Fue profundo el sueño que Sofía, tan solo veía imágenes en su mente que reflejaban lo que realmente era el verdadero amor, y tan solo por un últimos adiós y un ultimo beso que desearía haber recibido de el antes de partir...
Tal así que desde su juventud ella amo y supo amar.
Fue Juan quien entelo a Sofía en su corazón. Juan la había conocido en una fiesta de colegio. Sofía era una chica de apariencia discreta pero frágil de corazón.
Tan solo unos meses de amistad y luego de tres años de noviazgo, con tan solo veintiun años, Sofía quedaba embarazada. El sus fue total para Juan quien no aceptaba, hasta llego a tratar a Sofía como una cualquiera.
Los padres no aceptaban lo que le había pasado a Sofía y tomaron medidas de eso..
-Mira. Como nos paga -Dijo el padre a Juliana, madre de Sofía.
Aun así ella no perdía la esperanza, que otro amor llegara a ella. Alejandro un viejo amigo se había enterado de lo que le había pasado a su viejo amor. -Quien es - dijo el padre - No lo se, Señor - dijo la enfermera - Una silueta robusta, de cabellera negra y ojos marrones y de rostro firme pero con una pequeña palidez en su rostro. Alejandro - respondió Sofía, con lágrimas en los ojos.
-Hola Don Bataglia - dijo el joven -Minutos después la enfermera dio de alta a Sofía y tan solo le dijo: Si sientes mareos es normal..
Alejandro paso a ser de amigo a novio de Sofía, aun así que Sofía estuviese esperando una criatura, y con mucha alegría le había dicho que cuando naciera la criatura lo reconocería como suyo.
Aún así los padres de Sofía no aceptaban a Alejandro en la familia y era por la desconfianza que había dejado Juan como novio. Nada mas de el se supo luego que se entero que Sofía estaba embarazada.
Alejandro fue incondicional para Sofía, habían ya pasado nueve meses y la criatura había nacido, aun el estaba con ella.
Pasaron cinco años del nacimiento de la criatura , Alejandro, decide tomar una decisión muy grande en su vida - Sofía hay algo que quiero decirte -Si, dime- Dijo la niña- Te casarías conmigo?. Los ojos azules de Sofía estallaron de lágrimas y tan solo faltaba la decisión de los padres de Sofía.
Estaban en la mesa, Don Bataglia con su esposa y Sofía junto a Alejandro, y luego de varios minutos Alejandro decide tomar la iniciativa de decírmelo a los padres.
-Papa, hay algo que nosotros debemos decir, aquí en frente a ustedes - dijo Sofía entre risas -Y que es hija - dijo el padre-
- Bueno Don Bataglia Sofía y yo queremos casarnos. Tan solo esa palabra producía ira a Don Bataglia. Con mirada serena y certera, ¡no!
Así termino un romance que duro para Alejandro que aun así amaba a Sofía. Cada vez que se encontraban, Alejandro le decía que aun la amaba, y esas palabras hacían que Sofía se sienta segura con el , porque sabia que estaba hay siempre , siempre....
Cada uno hizo su vida, pero tan solo la soledad y la amargura cogia el corazón de los dos.
Un domingo recibe el llamado de una amiga suya, a quien nunca llego a saber quien era tan solo dijo; Ven rápido el esta mal, sufrió un accidente.
-Quien -Respondió Sofía - Y la respuesta fue directa y dolorosa.
- Alejandro.
Tan solo cogio su cartera y tomo rumbo hacia su casa, tan solo oraba y pedía a dios que no este grave y se salve de ese accidente y no le deje sola..
Llego hasta la casa habían una ambulancia y caterva, entre ellos vecinos y amigos. No dejaron entrar a Sofía, pero luego de varios intentos una mano tomo la suya y era Marta la prima de Alejandro quien estaba con lágrimas en los ojos. Entro en la pieza de Alejandro y no lo encontró, luego vio que estaban en la sala los médicos y Alejandro tirado en el sofá. Alrededor estaban los doctores tratando de ayudarlo. Se arrodillo Sofía y frente a ella un medico dio su lugar para el ultimo encuentro.
Tomo su mano y le dijo al oído: "No me dejes, mi amor, te necesito, no me dejes, por favor" Sofía le acomodaba el pelo mientras le hablaba y tan solo dijo; No hables, calla que luego estaré contigo Sofi, Una sonrisa espontánea quedo grabada en el rostro de Alejandro. Con la cabeza baja y entre sus manos, Sofía se encontraba y fue Marta quien le dijo al oído- Suéltalo el ya no te escucha, se fue. Sofía no permitía y cayo en un profundo desmayo. El hombre que había amado y querido, se había ido de ella para siempre.
Fue profundo el sueño que Sofía, tan solo veía imágenes en su mente que reflejaban lo que realmente era el verdadero amor, y tan solo por un últimos adiós y un ultimo beso que desearía haber recibido de el antes de partir...
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